Si miramos muchas de las encuestas realizadas en torno a las preferencias con respecto al sexo, encontramos una gran cantidad de diferencias. Sin embargo, un aspecto que suele subrayar casi todas las personas es el de la higiene. Podría decirse que muchos aspectos de la higiene tienen bastante que ver con la cultura. Dentro de algunas culturas algunos hábitos pueden considerarse deseables, mientras que otros son tildados de antihigiénicos. Incluso en una cuestión como esta puede intervenir factores bastante subjetivos y culturales No obstante, un cuerpo limpio siempre apreciado.
Uno de los requisitos mínimos de muchísimas personas para aceptar tener un contacto más íntimo es que la otra persona cuente con una higiene adecuada. Quizás no todas las personas conceden la misma importancia a este tema. Así, hay quienes creen que imprescindible especialmente la limpieza buco-dental, mientras que hay otros que se fijan bastante en los olores corporales. Unos pies, que despiden olores desagradables pueden desanimar a muchos deseos de amantes.
Ciertamente el cuerpo humano tiene sus aromas naturales, que despide constantemente y que no tienen que ser necesariamente desagradables. El problema es que los efluvios corporales permanecen en el cuerpo y se degradan. Esa transformación actúa como caldo de cultivo para gérmenes que generan el mal olor corporal. Esto puede resultar atractivo par algunas personas, pero a la mayoría les produce rechazo. Resulta nefasta la costumbre de intentar encubrir sus olores con el uso de productos cosméticos. La falta de higiene personal suele dar un resultado bastante repugnante.
Una buena ducha hace milagros, el pertinente uso del bidé mantiene en forma las zonas más íntimas. Sin olvidar la higiene en la boca que es la carta de presentación y que siempre debe estar practicable. Puede que algunos olores del cuerpo te parezcan atractivos, otros seguramente te produzcan rechazo.
¿En algún momento has rechazado a alguien por su falta de higiene? Debes prestar bastante atención a la hora de mantener el cuerpo limpio. Dedicar especial atención a algunas partes de tu cuerpo cuando tienes una cita. ¡Que una falta de higiene no tire por tierra lo que puede llegar a ser una gran cita!